Editorial

COLUMNA: EN PLAN REFLEXIVO

Por Armando Maya Castro | martes, 16 de julio de 2024

EMX-COLUMNA: EN PLAN REFLEXIVO

LO QUE DEBE HACER MORENA PARA ESTAR MÁS DE 12 AÑOS EN EL PODER


Dependerá mucho del quehacer gubernamental de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, y de los gobernadores morenistas en los estados de la República Mexicana, para que Morena se mantenga por mucho tiempo en el poder. 

En estos momentos la mayoría de la gente de México quiere que esto suceda porque está harta de partidos como el PAN, PRI y el extinto PRD. Fuimos testigos de ello en los comicios del pasado 2 de junio, cuando 39.9 millones de mexicanos acudieron a las urnas para votar por la candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia, conformada por Morena, el Partido del Trabajo y el Verde Ecologista.

Sin embargo, para permanecer en el poder después de este triunfo histórico e inédito, es necesario que el proceder de cada servidor público de Morena sea con transparencia y honestidad. Existe disposición para ello por parte de Raquel Buenrostro Sánchez, a quien Sheinbaum le ha confiado la Secretaría de la Función Pública. La actual titular de Economía ha prometido cero corrupción en el gobierno que a partir del 2 de octubre encabezará Sheinbaum. 

Esta funcionaria dijo sentirse honrada con su nuevo nombramiento, pues le permitirá dar continuidad al proyecto que inició Andrés Manuel López Obrador, quien ha hecho diversos llamados a trabajar en contra de la corrupción, afirmando que esta es “la causa principal de la desigualdad, pobreza, violencia, migración”.

La mayoría de los mexicanos somos conscientes del daño que la corrupción gubernamental ocasionó en el pasado a la economía del país. No olvidemos: el PRI desde su fundación misma en 1929, bajo el nombre de PNR, estuvo vinculado a innumerables casos de corrupción y represión, así como de abuso de poder. 

La derrota vergonzosa que este partido y el PAN sufrieron el pasado 2 de junio fue consecuencia de la corrupción reiterativa de innumerables políticos pertenecientes a estos dos partidos. Se equivocaron al apostar a la amnesia de un electorado que sigue teniendo presente los actos de corrupción del llamado Nuevo PRI, el cual resultó tanto o más decepcionante que el PRI del pasado.  

Morena tiene la obligación de cerrar las puertas a la corrupción, creando políticas públicas para atar las manos a los corruptos. No más casos de corrupción ni pactos de impunidad entre políticos. El trabajo de todo político y servidor público de Morena debe estar orientado a conservar el gran capital político que les deja AMLO. 

En caso contrario, le puede suceder en el futuro lo que le sucedió al PRI, el partido que dominó la vida política de México por más de 70 años, el mismo que en los últimos años ha venido a menos debido a los escándalos de corrupción e irrelevancia política, situación que ha reducido a este partido al tamaño de una franquicia. 

Y qué decir de lo que en las últimas semanas ha protagonizado Alejandro “Alito” Moreno en el afán de no dejar la dirigencia del partido, generando un enfrentamiento entre los que permanecen leales a “Alito” y la disidencia priista, acusándose mutuamente de tráfico de influencias, corrupción, desvío de fondos federales, lavado de dinero, peculado, magnicidio y del tristemente célebre Pemexgate.